Entre los rescatistas es bastante conocido el hecho de que la mayoría de los perritos o animales que logran ser rescatados demoran más en recuperarse a nivel psicológico de lo que podría demorar en sanar todas sus propias lesiones físicas.

Por eso sacar a una criatura de las calles o de un hogar en el que han recibido malos tratos, pues no resulta siempre tan sencillo.

Aunque ellos se merecen siempre tener una vida mejor.

Algunos perritos parecen confiar en sus rescatistas apenas los ven pero hay otros a los que les es imposible dejar su pasado atrás y darle una oportunidad a cualquier humano. Esta situación es precisamente la que enfrentaron los voluntarios de Crowfoot Kennels Dog Rescue, cuando quisieron acercarse a un perrito aterrorizado entre unos arbustos.

Esta organización sin fines de lucro con sede en el pueblo de Church Broughton del estado de Derbyshire (Inglaterra), no sabía a qué se enfrentaría cuando recibieron el reporte de un animalito abandonado que necesitaba ayuda.

El perro se negaba a recibir ayuda.

El can fue hallado por un granjero entre unos arbustos que rodean la carretera de Ashbourne a Sudbury. El hombre que pasaba por el lugar escuchó el llanto imparable de la criatura y decidió ayudarlo, se sorprendió al notar que era un perrito pero por nada del mundo pudo acercársele.

El desconsolado animal se aterrrizó pero los rescatistas pudieron salvarlo.

El granjero no sabía cómo animarlo a dejarse ayudar así que decidió llamar a los rescatistas para que fuesen ellos quienes actuaran. Al llegar al lugar, el pastor alemán estaba más que asustado por la gente.

“Cuando llegamos pudimos ver que el perro estaba angustiado con tener gente cerca. Podíamos ver que el perro el pastor alemán blanco estaba en muy mal estado, creemos que es bastante viejo”, escribió la organización en su Facebook.

Después de unas horas, el peludo cedió a la amabilidad de los voluntarios que lograron atraparlo y meterlo en la furgoneta. El perro necesitaba atención médica pues no saben cuánto tiempo había permanecido allí.

Alguien lo había dejado atado pero la criatura no tenía ningún chip.

Sophie Bacon, presidenta de Crowfoot Kennels Dog Rescue, explicó la frustración que sentía con este caso. La criatura había sido dejada con la finalidad de que nadie pudiese rescatarlo, fue un milagro que el campesino lo escuchara pero su estado es lamentable.

“Dejaron al perro esperando que nadie lo encontrara, está muerto de miedo. Me enfurece. El perro es mayor y su pelaje está enmarañado y el olor es horrible. Creemos que podría tener que ser sedado para ser tratado”, agregó.

Su pelaje delata sus días difíciles de negligencia y abandono.

La criaturita mostró pánico ante el contacto con los humanos así que su adaptación está siendo algo lenta. Su caso deja al descubierto no sólo las lesiones físicas o enfermedades a las que se enfrentan los perros abandonados, sino a las secuelas psicológicas que todo el abuso puede traer en ellos. Sophie está indignada por la situación.

“No sé por qué alguien dejaría a un perro atado en un sitio como ese. Podrían dejarlo en la puerta del centro de rescate para que se pueda encontrar al perro o incluso mejor, simplemente entrar”, señaló Bacon.

¡Pero la cobardía de muchos parece ser más grande que cualquier pizca de humanidad!

Sólo un desalmado comete actos como ese contra un inocente que no puede ni hablar como para denunciar todo lo malo por lo cual pudo haber pasado. Esperamos que ahora este peludo reciba el amor que merece y de la mano de los voluntarios alcance una vida mejor.

Este caso es sólo uno de los muchos animales que sufren abusos diariamente, comparte la historia y que el rostro de este peludo sirva a muchos para reflexionar antes de dejar a sus mascotas.